Centro Preparador Personal
de Oposiciones
Seleccionar página

Durante los últimos meses la vida ha dado un giro de 180 grados. Han sucedido cosas que un año atrás ni siquiera imaginábamos que pudieran suceder y todos nos hemos quedado un poco perdidos y desconcertados. En circunstancias así es fácil que la motivación se vea afectada y de eso va este artículo, de no desmotivarse.

Creemos necesario recordaros por qué opositáis y por qué los tiempos que corren pueden jugar a vuestro favor a la hora de conseguir una plaza, del mismo modo que recordamos porqué vivimos. Vivimos porque tenemos esperanza.

Bien es cierto que la vida se ha quedado parada, casi en una foto fija, nada se mueve y lo poco que se mueve lo hace tan despacio que es difícil no desesperarse. Pero incluso en una situación así es esencial convertir lo negativo en positivo para lograr nuestros objetivos.

Primero, hay que recordar que “parado” no significa “descartado”. Las ofertas de empleo público y las necesidades de personal siguen vivas, se están ofertando más plazas y las pruebas van a celebrarse. Esa es una certeza incuestionable. El proceso se ha ralentizado, pero vuestro sueño sigue ahí.

Segundo, parece que los estilos de vida han cambiado drásticamente para multitud de profesionales y para un gran número de oficios. Pero no para el opositor, para quien el encierro y la clausura son situaciones perfectamente asumidas. Estamos adaptados para todo aquello a lo que tienen que adaptarse los demás, incluso con respecto a personas que ahora mismo deciden preparar por primera vez una oposición y necesitan pasar por un período de adaptación que nosotros tenemos más que superado.

Este es el secreto. La capacidad de adaptación. Buscar cómo hacerse a este nuevo molde y aprovechar las oportunidades que presenta este nuevo estilo de vida.

Toque de queda, Estado de Alarma… son conceptos que a nosotros no nos afectan. Nuestra vida ya era un Estado de Alarma antes y los toques de queda obligaciones implícitas a un hábito saludable de estudio. Los opositores ya vivíamos en un pre-Estado de Alarma y en régimen de clausura prematura, con lo que señores del Gobierno, esfuércense un poco más a la hora de ponernos retos porque este se nos queda pequeño.

Tercero, la calma. Saber que el país va a vivir en un ecosistema tan familiar para nosotros debe transmitirnos calma y seguridad. Hay que enfocar la situación de forma positiva, machacar más lo que ya hemos asimilado y asentar la materia en la que hayamos hecho menos hincapié. Tomaos esto como un regalo de tiempo extra que va a permitiros afrontar el examen desde una atalaya de seguridad completa. Es vuestro momento. Ahora más que nunca.

Queremos enviar un mensaje de ánimo para todos aquellos que deben compatibilizar trabajo y estudio, para aquellas personas que tienen cargas familiares o que anímicamente están afectadas por esta pandemia; queremos deciros que estamos aquí y que vamos a ofreceros lo mejor de nosotros mismos.

No os desaniméis. Lo vamos a conseguir juntos. Como decían en aquella película no importa lo fuerte que golpee la vida. Resistiremos esos golpes y avanzaremos en medio de ellos hasta la victoria final.

Incluso aunque llueva fuerte y el día se vea oscuro, debajo de esa lluvia se podrá encontrar aquello que hemos buscado toda nuestra vida.

error: ¡Contenido protegido anticopia!
Call Now Button